La regulación económica juega un rol fundamental en nuestro país,
pues delimita no sólo el espacio de actuación entre el Estado y los
privados, sino también entre éstos últimos, a fin de asegurar el
correcto funcionamiento de los mercados. Al mismo tiempo, impone
grandes desafíos al requerir una adecuada articulación y balance de
políticas públicas y decisiones económicas, junto a un cumplimiento
de la normativa administrativa, sectorial y de libre competencia.
Trabajamos en áreas de regulación económica de ciertos mercados
(telecomunicaciones, educación, bancarios, seguros, salud, aéreo,
entre otros), considerando adicionalmente variables económicas y
políticas.